El alojamiento está muy bien ubicado, es centralizado y cerca de lugares turísticos como la Plaza Vergara, el Mirador Jorge Alejandre, el Reloj de Viña y la Quinta Vergara. Además, en la calle hay muchos servicios de comida, botellería y bares abiertos toda la noche.
El servicio es óptimo, con un personal amable y atento. La limpieza es excelente y se ofrece té gratuito. El ambiente es muy familiar y acogedor.
Las habitaciones son muy lindas y ajustadas, con duchas calientes y un gran espacio. La distribución es buena y hay lockers para dejar cosas en seguridad.
Se puede llegar fácilmente al mar y disfrutar de actividades cercanas. Además, el alojamiento tiene una buena ubicación para locomoverse a cualquier lugar.
La seguridad es de 24 horas, lo que garantiza una estancia tranquila y segura.